Corría el año 2003 cuando Yoan me hablo por primera vez del fenómeno flash mob. Para los que no lo saben, un flash mob (que no tiene nada que ver con el mobbing) es una movilización popular semi-espontánea llevada a cabo por X personas que no se conocen entre si, en un preciso lugar X y a una determinada hora X.
Se suelen organizar por internet, como no y es algo bastante underground.
Se suele acordar que el primer flash mob ocurrió en el noveno piso de unos grandes almacenes de Nueva York, en el año 2003. Unas 300 personas se reunieron en la sección de alfombras, concentrándose delante de uno especialmente caro. Al cabo de pocos minutos la gente se disperso delante de los ojos incrédulos de los guardias de seguridad.
El 28 de agosto de 2003, unas 300 almas organizadas se reunieron debajo de la pirámide del Louvre en Paris, tenían de andar rápido y hablar por teléfono, pararse de repente y aplaudir algo en el cielo. Os dejo imaginar las caras de sorpresa de los transeúntes.
Supongo que los flash mobs no son legales en Francia porque hay que avisar a la policía de cualquier agrupación organizada de gente. Por eso me invitan a estos eventos de manera muy discreta. No tengo constancia que se haya organizado uno en España. Seguramente no tardarán en aparecer por estas tierras, en Madrid o en Barcelona.
Hoy mismo he recibido una invitación para asistir a uno que tendrá lugar el … se me olvidaba, es secreto.
Si no te has enterado de nada, te puedes pasar por Wikipedia y el site de ParisMobs donde podrás ver fotos de los últimos flash mobs llevados a cabo en la capital gala.